No hay sueños pequeños. Sobre la valentía, la imaginación y la formación del Israel moderno.

¡No hay sueños pequeños!

Esta es la historia de la formación de un verdadero líder. Enseña valentía y disposición para tomar decisiones difíciles, basándose en principios y valores. Enseña a no tener miedo de soñar, crear y alcanzar los objetivos propuestos. Inspira a superar las dificultades, por muy insoportables que parezcan.

«Necesitamos una generación que considere el liderazgo como una noble causa, definida no por ambiciones personales, sino por la moralidad — y el llamado a servir. Necesitamos líderes que crean que el mundo se puede cambiar no a través de asesinatos y disparos, sino mediante la creatividad y la competencia... Estoy lleno de esperanza, porque creo que esta generación ya está en camino, en este momento ya está caminando por la Tierra» — Shimon Peres, uno de los líderes del Estado de Israel, que se formó gracias a sus esfuerzos.

"Shimon Peres convirtió un país de promesas en la Tierra Prometida, llegando aquí como un niño de once años de un pequeño pueblo polaco. Aquí Shimon creció, trabajó en un kibutz, se convirtió en líder de la juventud israelí, se casó y se unió a la construcción de un increíble país de oportunidades y realización de sueños."

Simón Peres abre su alma con facilidad y humor, resumiendo sus logros y los logros de Israel en el desarrollo de los sectores de la aviación y aeroespacial, el arte de la negociación con los gobiernos europeos y asiáticos, y el intento de combatir el terrorismo en Oriente Medio y en el mundo.

"Los esfuerzos de esta persona dieron lugar al Estado de Israel, con la mejor medicina del mundo y una cantidad de startups que supera incluso a las de Silicon Valley. Y aunque los sueños tienen su precio, Peres soñaba con todas sus fuerzas y creía en el milagro. Y se hizo realidad, porque no hay sueños pequeños."