"Me pareció — que siempre vivo. Obras seleccionadas"

Inquebrantable e indomable. Cantado y prohibido. Verdadero hijo de su pueblo y desesperado defensor del mismo. Un hombre que ha sobrevivido a tantas pruebas que habrían socavado la fuerza de los dioses. Pero no la fuerza de voluntad de Vasyl Stus. Pulido por los desafíos de la vida, se convirtió en acero ante la tormenta de la adversidad, pero mantuvo la suavidad del corazón y la calidez del alma. Su poderosa palabra a través de los años ondea como una bandera de libertad y es un faro para aquellos que se han perdido en los caminos de la vida.